Bolzano/Bozen, 26 de enero de 2006
El 24 de marzo de 1976 una junta militar actuó un golpe
de estado militar, llevó al poder al general Jorge Rafael
Videla e impuso la ley marcial. La dictadura militar (1976-1983)
escribió las páginas más obscuras de la
historia argentina con miles de opositores al régimen
ilegítimamente encarcelados, torturados y ajusticiados. El
balance de la violencia es de 368 campo de concentración
en todo el país, 2.300 homicidios políticos,
más de 10.000 arrestos políticos, miles de
exiliados y 30.000 desaparecidos. La feroz censura - más
de 100 periodistas fueron asesinados o desaparecieron -
garantizó que los medios no hablaran de los desaparecidos
ni escribieron de ellos, como si no hubieran existido.
En este clima de terror y silencio un grupo de mujeres
decidió desafiar al poder por amor a sus hijos
desaparecidos, y el 30 de abril de 1977 empezó a desfilar
silenciosamente en Plaza de Mayo, denunciando públicamente
las atrocidades del régimen. Desde entonces no se pararon:
todos los jueves, 1.500 veces hasta hoy, han seguido caminando en
Plaza de Mayo para pedir justicia y para dar más fuerza a
sus demandas públicas las Madres de Plaza de Mayo han
organizado hace 25 años las Marchas de Resistencia : 24
horas marchando sin interrupción al rededor de la
Pirámide de Mayo.
Hoy, después de 1.500 jueves caminando y 25 marchas de
resistencia las Madres han decidido no marchar más. Hebe
de Bonafini, presidente de la organización comenta esta
decisión: "Kirchner nos abrió las puertas de la
Casa Rosada, derogó las leyes de obediencia debida y punto
final, sacó las fotos de Videla, dijo que va a cambiar los
planes de estudio de la Escuela Militar. Hacemos la última
Marcha de la Resistencia porque en la Casa Rosada ya no hay un
enemigo". Sin embargo, "No suspenderemos las caminatas de cada
jueves. Los jueves son silenciosos y son nuestros".