Bolzano/Bozen, Göttingen, Moscú, 20 de enero de 2005
Las comunidades de los pueblos indígenas Nivjos,
Nanayes, Orokis, Evenkos y otros, juntos a la federación
RAIPON que reune a todos los pueblos indígenas siberianos
y a la Asociación para los Pueblos Amenazados
Internacional (APA) dieron inicio a una ofensiva mundial contra
las transnacionales Exxon-Mobile, BP y Royal Dutch/Shell para
evitar la destrucción de las isla de Sajalín. En
Sajarín se encuentran los mayores yacimientos conocidos de
petróleo y gas líquido, cuya explotación
requiere la construcción de un oleoducto que
pasaría por los 1103 rios y torrentes de la isla. Es
justamento lo que los 3.500 indígenas de Sajalín
quieren evitar.
Con el apoyo de las organizaciones para los derechos humanos, los
3.500 indígenas piden que la construcción de
infraestructuras de este tipo sea precedida por un estudio de
impacto ambiental realizado por una institución neutral.
En síntesis, los indíegans quieren impedir que sean
destruídos los desoves del salmón, contaminados los
rios y torrentes, interrumpidos los pastos de los renos y
animales selvajes. Los pueblos indígenas también
quieren ser consultados por cada decisión relativa a la
construcción de las infraestructuras, y piden que las
transnacionales crean un fondo que en caso de daños o
accidentes pueda garantizar una rápida intervención
de saneamiento ambiental. En fín, el fondo debería
ser usado para compensar los daños para las economias
tradicionales.
Además de dañar gravemente la vida económica
de las poblaciones indígenas, el proyecto también
amenaza a todo el sistema ecológico de la isla y a todas
las especies animales en extinción, entre los cuales una
manada de sólo 100 ballenas grise, que viven en las aguas
de las costas de Sajalín. Tampoco hay que olvidar que todo
el area por el cual pasaría el oleoducto es de alto riesgo
sismico. A traves de una campaña mundial de e-mail, fax y
otros medios de comunicación la APA quiere comprometer a
cuantas comunidades indígenas y organizaciones para los
derechos humanos y las minorías posibles. La APA invita a
todos protestar contra este proyecto también delante de
las oficinas de las transnacionales comprometidas.