Bolzano, Göttingen, 8 de Agosto de 2003
En ocasión de la Jornada Internacional de los Pueblos
Indígenas, la Asociación para los Pueblos
Amenazados (APA) quiere recordar las condiciones cada vez peores
en las cuales los pueblos indígenas de todo el mundo deben
vivir. Los pueblos indígenas están siempre
más marginalizados, sus culturas y conocimientos estan a
riesgo de perderse para siempre. El riesgo de desaparecer en
pocos años es muy alto sobre todo para los pequeños
grupos que adaptaron su estilo de vida y su subsistencia a
condiciones ambientales dificiles y delicadas, como p.ej. los
nomades del mar en el sureste asiático, los pigmeos de los
ultimos grandes bosques africanos o los indígenas de
Ecuador amenazados por la extracción de
petróleo.
Los pueblos indígenas son los grandes perdientes de la
globalización. En 1994 las Naciones Unidas proclamaron el
decenio de los Pueblos Indígenas con el fin de protegerlos
de la selvaje extracción de recursos naturales en su
territorio, de la deforestación de sus bosques y de la
desviación de sus rios por las represas. Sin embargo hasta
hoy no hubo ninguna limitación al robo de las tierras
indígenas ni a la contaminación ambiental, no hubo
nada que impidiera la destrucción del habitat vital de los
pueblos indígenas.
Los pueblos indígenas de todo el mundo, que sean
pequeñas comunidades como los pueblos siberianos en el
norte de Rusia o comunidades más grandes, están
amenazados por lo que nosotros llamamos progreso: desplazados por
las necesidades de un desarrollo insostenible, ellos tienen que
luchar cotidianamente contra la miseria. Tomando a ejemplo la
sociedad chilena, vemos que los sectores más pobres
están compuestos por los Mapuche, los cuales son el 10% de
la población total chilena. Quienes decidieron defender la
propia tierra con medios jurídicos o protestar
públicamente por la miseria en la cual están
obligados a sobrevivir están expuestos a la arbitrariedad
y la violencia de los militares y de la policia. Actualmente
más de 100 Mapuche se encuentran encarcelados desde hace
meses, a menudo sin juicio.
Después de la caída de la dictadura de Augusto
Pinochet en 1990, el nuevo gobierno chileno emitió una ley
que debería proteger a los pueblos indígenas del
país. Sin embargo en la realidad no cambió nada,
las condiciones de vida de los pueblos indígenas siguen
siendo las mismas. Por este motivo la APA decidió apoyar y
patrocinar el primer congreso del pueblo Mapuche que está
organizado en Chile para octubre de este año. 300
delegados tendrán que crear una organización capaz
de representar sus derechos y peticiones ante el gobierno chileno
y sus instituciones.
Según las estimaciones de la APA, en todo el mundo hay
más o menos 5.000 pueblos indígenas por un total de
300 millones de personas. Componen este vasto grupo
también los Adivasi en India, los Saami en el norte de
Europa, los indígenas del norte, centro y sur de America,
los San en Africa meridional, y muchos otros más.